Crece la preocupación en Europa por el aumento de casos de intoxicación provocados por la ingesta de un alimento de consumo masivo: se reportaron más de 20 casos relacionados directamente con el mismo producto.
Actualmente es bastante común sentirse indefenso frente al entorno, pues la seguridad no está garantizada en ningún área del quehacer humano. Las situaciones en las que uno está en peligro son incontables, y los ciudadanos desean realmente hallar algo en lo que confiar.
Una de las cosas respecto de las cuales la gente quisiera poder confiar es la alimentación. Esto no es ciertamente producto de la paranoia, puesto que sabemos muy bien que la comida puede resultar peligrosa. Por esta razón, hay que permanecer alerta siempre y mantenernos lo mayor informados posible.
Este último tiempo las noticias no cesan de informar sobre casos de intoxicación que son verdaderamente inquietantes. Ningún alimento está a salvo de la contaminación, ni siquiera los de marcas de renombre, como ocurrió con los chocolates de Kinder y Ferrero.
Son tantos y tan variados los virus y las bacterias que pueden infectarnos a la hora de consumir alimentos, que prevenirnos de ellos es casi una hazaña: cada vez son más las personas que padecen los efectos de la contaminación. Ahora bien, ¿a qué se debe esto? ¿existe alguna forma de protegernos y sentirnos seguros?
Vuelven a encenderse las alarmas en Europa
Estas son preguntas más que comunes para la mayoría de los ciudadanos. Pues, ¿quién no desea hallar la forma de obtener la mayor seguridad posible a la hora de satisfacer una necesidad tan básica como la alimentación?
Pareciera, sin embargo, que cada vez estamos más lejos de encontrar esa seguridad, puesto que hace relativamente poco comenzaron a surgir nuevos brotes de contaminación alimenticia en Europa.
Estos brotes son de la bacteria Listeria Monocytogenes, y fueron estudiados por un equipo de investigación alemán, que posteriormente publicó sus resultados en la revista Emerging Microbes and Infections.
Los datos recabados provienen de una extensa investigación llevada a cabo desde el año 2010 hasta el 2021. En ese largo período de tiempo los científicos involucrados descubrieron que entre los casos de listeriosis estudiados hubo más de 22 que fueron provocados por la ingesta del mismo alimento: el salmón.
La amenaza nunca duerme
Pero no se trata de cualquier salmón. El equipo de investigación alemán alertó específicamente acerca del salmón ahumado y marinado. Hay varios factores que contribuyen a la contaminación de este alimento, que van desde el momento en que se realiza la pesca hasta su procesamiento, cuyas prácticas de higiene no suelen ser las adecuadas..
De las 300 personas que han sido hospitalizadas a causa de la listeriosis en Alemania, han muerto 50, siendo 17 las muertes vinculadas directamente con el consumo de salmón.
Como podemos advertir, se trata de una situación critica. Se recomienda, por tanto, que aquellos que son más vulnerables, sobre todo quienes están inmunodeprimidos y las personas mayores, no consuman este alimento.