Dos cachorros de yaguareté nacieron libres en los esteros del noreste de Argentina. Es la tercera camada que crecerá bajo la supervisión del Proyecto Iberá.
¿Sabías que el yaguareté es el mayor felino de América? Lamentablemente, es también uno de los mamíferos más amenazados en países como Argentina, que en 2018 contaba con sólo unos 200 ejemplares en su territorio.
De hecho, a mediados del siglo XX, la especie se extinguió de la provincia de Corrientes debido a la cacería, la modificación del ambiente y la pérdida de sus presas naturales. Pero hay buenas noticias: antes de terminar el 2020, dos cachorros de yaguareté nacieron en el Centro de Reintroducción que funciona en el Gran Parque Iberá.
Estos nacimientos se produjeron bajo la supervisión del Proyecto Iberá, que abarca las 708.000 hectáreas del Gran Parque Iberá, el mayor parque natural de Argentina. El objetivo del proyecto es repoblar las especies extintas del ecosistema correntino.
El triunfo de la vida en los esteros del Iberá
Tanto los cachorros como su madre no suelen ser avistados ya que se encuentran dentro del corral más grande del Centro de Reintroducción. En un comunicado de la Fundación Rewilding Argentina, responsable del Proyecto Iberá, se explicó que se tuvo indicios de los nacimientos por los signos de parición presentados por la yaguareté Juruna.
El equipo técnico sospechaba de un posible parto por los comportamientos de la hembra, pero no pudieron confirmarlo hasta dos meses después, cuando las cámaras-trampa lograron registrar a dos cachorros.
“El nacimiento de estos cachorros es un paso muy importante para el Proyecto. Desde el año 2012 estamos trabajando en Iberá tratando de regresar al depredador tope a este ambiente, 70 años después de haberse extinguido en la provincia de Corrientes”, expresó Sebastián Di Martino, director de conservación de la Fundación Rewilding Argentina.
La importancia del Yaguareté en el Parque Iberá
La Fundación Rewilding Argentina desarrolla el Proyecto Iberá como parte del compromiso de Argentina con el objetivo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de preservar la biodiversidad del planeta en el decenio 2021/2030.
Gracias a este proyecto, tras 70 años de extinción en Corrientes, el yaguareté vuelve a caminar libre por el Iberá. Esta especie es esencial para mantener la salud y la integridad de los ecosistemas silvestres. La reserva alberga carpinchos, yacarés y ciervo de los pantanos que necesitan del rol regulador de este gran predador.
