¿Deseas recargar tu teléfono celular sin consumir electricidad? Hacerlo con este método será muy entretenido.
Todos lidiamos diariamente con el problema de tener que recargar nuestro smartphone debido a la poca capacidad de la batería. Quienes no deseen llevar consigo un incómodo y voluminoso cargador portátil, debe tener la precaución de salir a la calle con la batería cargada al 100%, especialmente si piensa estar muchas horas fuera de casa. La descarga cada vez más rápida de la batería es una de las principales razones, además de los daños provocados por las caídas, que lleva a las personas a cambiar de teléfono celular.
¿Cómo solucionar este inconveniente? La respuesta proviene de Holanda, con una iniciativa que podría mejorar radicalmente la vida de muchos de nosotros. Se trata de una manera económica y entretenida de recargar nuestro smartphone, lo cual permite evitar quedarnos aislados del mundo a causa de la descarga completa de la batería. Todo lo que se requiere es balancearse en un columpio.
Recarga tu teléfono mientras te diviertes en un columpio
La agencia holandesa ID310 ha inventado un columpio que a través de la energía acumulada por el balanceo es capaz de recargar la batería de pequeños dispositivos tales como un smartphone o un joystick. Sólo hay que mecerse en el columpio después de conectar el smartphone al enchufe y el mismo movimiento producirá la corriente necesaria para recargarlo de manera completamente gratuita.
Este invento ha sido testeado en aeropuertos y estaciones de tren, permitiendo a los viajeros pasar el rato de una forma entretenida. Cuando la batería esté totalmente cargada, un interruptor se encargará de avisarte. La primera estación en la que fue probado fue la de Utrecht, ubicada a unos 50 km de Ámsterdam. Inicialmente, la propuesta debía terminar tras una semana de pruebas.
Pero se decidió posteriormente dejar el columpio de manera permanente en la estación debido a que la gente los usaba diariamente. Sin importar la edad, estos divertidos columpios se han convertido en una verdadera atracción para muchos viajeros.
En el último tiempo, muchas otras estaciones han optado por implementar este singular columpio y es probable que su uso se extienda al resto de Europa, incluso en otros lugares públicos fuera de las estaciones y aeropuertos. El costo del dispositivo promedia los diez mil euros.