Preparando helado con esta receta, verás qué saludable, sabroso, dietético y ligero es, a partir de muy pocos ingredientes.
¡Qué delicia el helado! Probablemente el dulce más exquisito, tan delicioso en su clásico sabor Fiordilatte, o en sus versiones frutales, o como en las más adoradas por las infancias: chocolate, avellana y stracciatella. Sólo hace falta moverse hasta la heladería más cercana y deleitarse con toda la gama de clásicos y nuevos sabores.
Además, con estos calores del infierno, seamos honestos, se convierte en un gran sustituto de algunas comidas o cenas cuando el cansancio nos vence y no hay forma de juntar ganas para cocinar. Hay que tener en cuenta, empero, que su valor calórico es muy elevado y comer mucho engorda. A menudo, quienes siguen dietas muy estrictas, el helado es de las primeras prohibiciones.
No vas a creerlo, pero podemos hacer un helado muy cremoso, ligero y dietético con sólo dos ingredientes muy simples.
Con esta receta, come helado y adelgaza
La idea general que nos armamos al oír la palabra ‘dieta’, es una llena de platos poco atractivos, deprimentes y demacrados, llenos de verduras hervidas sin condimentar, que terminan por asediar nuestras ganas de cuidar la salud y seguir con el control de la alimentación. El tema es, como siempre decimos, hay que amigarse con la comida. Con solo una pizca de ingenio, podemos cuidar nuestros organismos sin abandonar esos manjares que nos encantan. Por ejemplo, el helado.
Emulsionar leche, nata, azúcar y demás ingredientes, es muy calórico ya que hay muchas grasas presentes. Pero podemos preparar un helado con una consistencia increíble y que sea dietético. No vas a engordar por su culpa y tampoco vas a tener que abandonar aquello que tanto deseas. Esto es lo que necesitarás:
- 500 g de plátanos maduros
- 2 cucharadas de miel
- 2 cucharadas rasas de cacao sin azúcar
- 1/2 vaso de leche
Como verás no vamos a agregar nada de azúcar. Con esta increíblemente sencilla receta, sólo aprovecharemos el dulzor del plátano y la miel. Agregaremos un poco más de sabor con el cacao, pero perfectamente puede ser evitado para quedarnos con un sabor más frutal.
Para empezar, pela los plátanos y córtalos en trozos. En una batidora mézclalos junto a la leche, la miel y el cacao durante unos minutos hasta que la preparación sea cremosa y bien espesa.
Luego colócala en una bandeja rectangular, o en los moldes de helado envasado, y guarda en el congelador durante unas horas. Cada tanto deberás mezclar para conservar la cremosidad. Forma unas bolas ayudándote con una cuchara y sirve el helado en copas de cristal. Disfruta sin culpas.