¿Conoces los humedales de Argentina? Existen 23 sitios Ramsar aptos para hacer ecoturismo, explorar paisajes únicos y valorar la biodiversidad.
En 1975 entró en vigencia la Convención de Ramsar, un tratado ambiental intergubernamental establecido por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, para la protección y conservación de 2.400 humedales y otros ecosistemas del planeta.
Dentro del catálogo de áreas protegidas por el convenio, hay 23 humedales situados en Argentina, distribuidos entre 15 provincias y la ciudad de Buenos Aires. En total son 5.687.651 hectáreas que reúnen ambientes naturales y ecosistemas diversos.
La riqueza de las regiones geográficas que los abarcan es tan variada como preciada en biodiversidad. Incluyen lagunas altoandinas, zonas costeras marinas, lagunas endorreicas, turberas y llanuras de inundación, entre otros. Aquí se puede apreciar su distribución en el vasto territorio argentino.
Entre las principales propuestas turísticas que se pueden encontrar en torno a estos sitios, podemos mencionar la práctica de deportes acuáticos, la observación de fauna y flora, excursiones fotográficas y experiencias de aventura.
En estos paisajes existen diversas poblaciones de aves y otras especies animales, que se revelan ante los ojos del visitante y el lente de la cámara inquieta.
A continuación, recomendamos cinco sitios incluidos dentro del catálogo Ramsar, todos con una enorme importancia.
1. Laguna de los Pozuelos
Dentro de la ecorregión de la Puna argentina, en Jujuy se encuentra este sitio de importancia internacional para la conservación de aves, a 4.000 metros de altura sobre el nivel del mar.
También es territorio de conservación de algunos mamíferos en extinción como la vicuña. Y de especies que solo se desarrollan en esta región como el pato puneño, la avoceta andina, la guayata o la gallareta gigante.
Junto a este paraíso -elegido como hogar por 30.000 ejemplares de tres especies de flamencos altoandinos– se encuentran las Lagunas de Vilama, en la Reserva Provincial Altoandina de la Chinchilla. Por eso, quien visita este rincón de la Puna jujeña cuenta además con los privilegiados avistajes de la chinchilla.
2. Lagunas Altoandinas y Puneñas
La Reserva de Biosfera Lagunas Altoandinas y Puneñas de Catamarca, en la región de Antofagasta de la Sierra, cuenta con 1.228.175 hectáreas. Estas presentan cuencas endorreicas con salares como Carachi Pampa; e incluso lagunas como Grande, Diamante, Baya, del Salitre o Aparoma, entre otras.
La geografía de esta reserva Ramsar incluye morfología volcánica. Destaca en la región la presencia del Volcán Galán, cuyo cráter es tan grande que no se percibe incluso estando dentro de él.
3. Humedales del Chaco y Jaaukanigás
Los humedales de la provincia del Chaco están localizados en la franja oriental de los departamentos de San Fernando, Primero de Mayo y Bermejo. Es un ecosistema único en la ecorregión del Litoral, conformado por la confluencia del río Paraguay con el Paraná.
Hacia el sur, los humedales chaqueños se unen con Jaaukanigás, en provincia de Santa Fe. Ambos sitios conforman un excepcional corredor de humedales fluviales de unos 450 kilómetros ininterrumpidos de extensión y de enorme valor biológico.
En el sitio oficial de la ciudad de Reconquista se detalla que esta ecorregión cuenta con una fauna muy diversa. Peces como el sábalo, surubí, dorado o pacú; 36 especies de anfibios; 46 de reptiles, que incluye la víbora de cascabel y la yarará, así como el yacaré overo o las tortugas de agua.
Hay otras características que hacen que de estos humedales tengan prioridad de conservación ecológica: la existencia de especies en peligro de extinción como el ciervo de los pantanos o en situación de vulnerabilidad como el lobito de río, además de especies tan raras como el pez lepidosirena.
4. Lagunas y Esteros del Iberá
Estos ecosistemas se encuentran dentro del macrosistema del Iberá, que se extiende por 1.300.000 hectáreas. Por allí corren las aguas del río Corrientes, que desagua en el tramo medio del río Paraná.
(Foto: Intriper)
Estos hábitats con concatenaciones de lagunas, esteros y humedales, brindan refugio a muchas especies de reptiles que se encuentran en el listado internacional de animales amenazados o en peligro de extinción de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Yacarés overos y negros, anacondas amarillas o curiyú, patos crestudos, lobitos de río, ciervos de los pantanos, entre otras especies, viven en esta increíble reserva natural.
Lo recomendable es visitarla en otoño o primavera, cuando el clima es más templado y la población de mosquitos disminuye.
5. Palmar Yatay o Parque Nacional El Palmar
El Palmar de Yatay se encuentra en la provincia de Corrientes. Es un ecosistema que se clasifica dentro de las características de los humedales de selva en galería, en medio de campos de producción forestal, ganadera y agrícola.
Se trata de gran bioma en el que conviven cerca de 150 especies de peces, 100 especies de aves migratorias, carpinchos, vizcachas y ñandúes.
Actualmente, parte de los hábitats correntinos se encuentran en proceso de recuperación debido a las pérdidas sufridas por los reiterados incendios en el Delta del Paraná en 2020.
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