Sin duda la música es una de las mayores pasiones de la humanidad. Aunque nuestra especie ha sido capaz de producir y evolucionar un sinfín de melodías según la moda, el humano no es el creador.
Ahora bien, es realmente impactante que la respuesta a la pregunta “¿Quién inventó la música?» sea ésta. La música tiene orígenes muy remotos, pero no responde a la era del hombre. Desde la prehistoria, la humanidad ha buscado sonidos y ruidos. Los sapiens, por ejemplo, ya emitían sonidos guturales como una precuela del habla. El inicio de la evolución del lenguaje estuvo determinado por la presencia de gestualidad –como señalar y hacer mímica- y sonidos naturales. Pero la música, nuestra compañera favorita, no debe su origen a la humanidad.
Es bueno constatar, en primer lugar, que la música nació por una conjunción de sonidos y gestos, pero no fueron los humanos quienes lo llevaron a cabo por primera vez. La naturaleza es una gran melodía que va desde el canto de los pájaros hasta el ronroneo de un gato. Se trata de algo tan instintivo, tan dependiente del estímulo, que el origen no puede ser otro.
El primer punto que vamos a revelarte es que la música es una creación animal, pero la verdad puede hacerte molestar. La molestia es más por la forma que ha determinado el desarrollo que por el protagonista.
Ésta es una prueba más de la valoración que debemos tener por las maravillas naturales.
Te presentamos a los arquitectos de la música
El académico David Schurth se ha aventurado con esta pregunta. No es raro que la ciencia responda, cuando toda investigación tiene como motor fundamental la curiosidad de la niñez. La Universidad Estatal de Washington, de donde es oriundo el mencionado académico, ha querido responder a este interrogante y bien podría darnos más detalles sobre la evolución humana.
Los monos inventaron la música. Para muchos podría resultar una obviedad dado que tanto monos como humanos descienden de un ancestro en común –los homínidos- pero no es la razón. Como ya dijimos, son las modalidades del descubrimiento lo que hace mella sobre el mecanismo de la evolución. Para sorpresa de todos y de algunos científicos importantes.
Según ellos, al saltar de una rama a la otra, los monos están expuestos a situaciones peligrosas, considerando una fuerte caída al suelo. Temiendo a los depredadores terrestres, realizan sus piruetas a gran altura y evitan así ser devorados.
Fue entonces que empezaron a producir llamadas con cierto rimo vocal dando lugar a las melodías. Este incipiente inicio del canto les permitió ponerse a salvo cuando saltaban de una rama a otra, anunciando su llegada y la posible presencia de un depredador.
Esos sonidos proto-musicales, como ancestros de la música, son un indicador de la coordinación muscular; tanto en su dimensión física –control muscular- como del desarrollo de la comunicación.
Es otro testimonio de la corta distancia que hay entre el animal humano y los monos. Como siempre, la naturaleza es un escenario indescriptible lleno de sorpresas.