Se celebra este día para resaltar el valor de la producción de la energía eólica. Su generación crece pero enfrenta críticas por problemas ambientales.
Cada 15 de junio se conmemora el Día Global de Viento para destacar la importancia que éste tiene en nuestras vidas. No solo como factor elemental para desarrollo de la biodiversidad y el ambiente, sino también para pensar al viento como fuente de energía alternativa para el desarrollo sostenible.
Este día internacional fue creado en el año 2007 por la Asociación Europea de Energía Eólica. El principal objetivo es difundir los avances en el desarrollo tecnológico del sector y de las empresas que operan en él.
Actualmente, las grandes potencias del planeta son las que lideran la producción de energía eólica. Entre ellas se encuentran Estados Unidos, China y Alemania. Al mismo tiempo, otros países emergentes se suman a esta tendencia, como Brasil e India.
El viento produce cada vez más energía eólica
Según la Asociación Mundial de Energía Eólica, en el año 2019 se dio el crecimiento más significativo en la producción de electricidad a través del viento. El reporte habla de un salto del 19% de expansión de la capacidad instalada.
En ese año, se incorporaron 60 gigawatts a los niveles de producción global. Un 54% de las granjas eólicas se instalaron en tierra y un 6% en mar. Se trató de un crecimiento que fue récord histórico, luego de tres años de disminución de energía producida por el sector.
La instalación de aerogeneradores sobre la superficie marina es una tendencia que viene en alza. Cada vez son más los países que instalan granjas sobre el agua. Puntualmente, este tipo de instalaciones significó una décima parte de los incrementos de producción de energía en 2019.
La Asociación Mundial de Energía Eólica destaca que la producción de esta energía renovable se desarrolla en 102 países. La producción de este tipo de energías está en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, que buscan reducir la emisión de gases contaminantes a la atmósfera.
Riesgos ambientales que se deben mitigar
Si bien este tipo de energía se plantea como una solución para desplazar a los combustibles fósiles (unas de las principales fuentes de emisión de carbono), hoy el sector enfrenta una encrucijada por los problemas ambientales que representa.
En Alemania, son cada vez más la comunidades que se oponen a la instalación de granjas eólicas por los ruidos molestos que generan. También está comprobado que los molinos y las aspas son una amenaza para aves.
Por otro lado, mientras las grandes potencias avanzan en el desarrollo de energía eólica, la producción de los molinos tienen su impacto negativo para el ambiente. Ecuador es uno de los países que sufre la depredación de bosques para la producción de aspas.