En el Día Mundial del Medio Ambiente es importante tomar consciencia de la destrucción de nuestros bosques, humedales y otros ecosistemas del planeta.
En lo que has tardado en abrir esta nota, parte de un bosque murió en el planeta. Y es que, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cada año se pierden más de 4,7 millones hectáreas de bosques, es decir, un área más grande que Dinamarca. Esto significa que cada 3 segundos desaparece una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol.
Además, la ONU advierte que hemos perdido la mitad de los humedales en el último siglo. Y también el 50% de los corales, cifra que para el 2050 podría llegar al 90%, incluso si el aumento del calentamiento global se limita a 1,5 °C.
Los datos son alarmantes y hay que insistir para que la población, además de tomar consciencia, se involucre en reparar algo del daño.
Estamos perdiendo ecosistemas y con ello los sumideros de carbono que tanto necesitamos. Los gases de efecto invernadero siguen aumentando y estamos a un paso de una catástrofe producto de ello.
La enseñanza que nos deja la pandemia de coronavirus es que ya estamos padeciendo las consecuencias de la pérdida de los ecosistemas: cuando se reducen los hábitats de los animales, se crean las condiciones ideales para que los patógenos se propaguen.
También puede interesarte:
- Una década para restaurar 350 millones de hectáreas de ecosistemas
- Tu alimentación puede ser la causa de la deforestación
Restauración de bosques y otros ecosistemas
La ONU define a los ecosistemas como la interacción entre los organismos vivos (plantas, animales y personas) y su entorno. Es decir, incluye tanto a la naturaleza como a los sistemas creados por los humanos, como las ciudades y las tierras de cultivo.
Por esa razón, el Día Mundial del Medio Ambiente 2021 está centrado en la restauración de los ecosistemas, y se celebra el 5 de junio bajo el lema “Reimagina, recrea, restaura”.
Llevar a cabo esta tarea a nivel global es un trabajo imponente porque hay que reparar millones de hectáreas para que la gente pueda volver a tener agua potable, acceso a alimentos y empleos.
Son necesarias las acciones individuales y colectivas para reforestar bosques con plantas nativas, reverdecer las ciudades, limpiar la basura de los ríos y las costas. Todo ello posibilitaría recuperar animales y plantas que hoy están en peligro de extinción, así como también crear empleos en las zonas rurales.
Los beneficios también serán económicos, ya que la ONU señala que por cada dólar invertido en restauración se pueden esperar al menos entre 7 y 30 dólares en ganancias para la sociedad.
Estrategias para lograr la restauración
Qué mayor celebración para este día que el comienzo del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), que a partir de hoy llevará a cabo la difícil y enorme tarea de recuperar lo que hemos perdido de la Tierra.
El objetivo es recuperar y proteger los ecosistemas a escala global para beneficio de la humanidad y de la naturaleza.
Lo que la ONU propone es poner un plazo límite, considerando la opinión de los expertos, para prevenir un cambio climático catastrófico. Para ello, se impulsará un sólido movimiento mundial que encamine al planeta a un futuro sostenible.
Si logramos tener ecosistemas saludables, podremos mejorar los medios de vida de las personas, disminuir el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad, aseguran desde el organismo.
Sus estrategias estarán guiadas por 10 acciones que deberían implementarse en los próximos 10 años. Con ellas se buscará dar más fuerza al movimiento de restauración mundial y fomentar el financiamiento de empresas, gobiernos y otros organismos para su ejecución.
También se buscará lograr cambios de comportamientos, como los hábitos de consumo, la inversión en investigación, la ayuda al desarrollo de capacidades de los sectores marginados y el crecimiento de la cultura de la restauración.
También puede interesarte:
- El cambio climático pone en riesgo a 710 millones de niños
- Deforestación en el Amazonas: 2020 fue el tercer peor año de la historia