La tecnología en producción de energía solar avanza. En el Instituto Tecnológico de Massachusetts se desarrollaron células fotovoltaicas imprimibles y flexibles. Te contamos sus beneficios.
En el siglo XXI los autos no vuelan y tampoco utilizan plutonio como combustible, como en lo presagiaba la película Volver al Futuro de Steven Spielberg. Pero sí que en estos tiempos el desarrollo tecnológico está transformando nuestras vidas de manera radical. Eso con lo que están leyendo este artículo -sí, tu móvil- es uno de esos ejemplos.
En el mundo hay varias universidades prestigiosas que dedican sus días a pensar, desarrollar y probar nuevas tecnologías. El Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT por si sigla en inglés) es una de las casas de estudios que se dedica a esto, y presentó en España avances en cuanto al desarrollo de células fotoeléctricas que permitirían fabricar mejores paneles para la obtención de energía solar.
Energía solar “flexible”
Una de las novedades de este nuevo tipo de células fotoeléctricas es que con ellas se podrían imprimir paneles solares con impresoras 3D. Además, tendrían una confección basada en flexibilidad, lo que permitiría enrollarlos y hasta incluso trasladarlos.
Pero lo más interesante radica en que los paneles que se podrían construir a partir de estas nuevas células serían más eficientes y económicos para generar la energía solar.
Este desarrollo fue realizado por el MIT.Nano, una dependencia que se dedica a estudiar y desarrollar dispositivos de una escala muy pequeña. Vladimir Bulovic, director de este departamento, explicó que el material que se ha logrado imprimir con este nuevo tipo de puede desplegarse en tejados y paredes como si fuera una alfombra para captar la luz del sol.
Energía más económica
Según este especialista, este tipo de avance en la obtención de energía solar permitiría ahorrar mucho dinero en la instalación del sistema en un edificio. Bulovic asegura que la instalación de los paneles rígidos de silíceo que se utilizan actualmente se llevan dos tercios del costo para hacerse de un sistema de energía solar.
Según explicaron los responsables del MIT, el avance en la innovación en esta materia permitiría reducir los costos al acceso a esta tecnología. Muchas personas en el mundo, que viven en sitios sin energía, podrían acceder a una electricidad sustentable y económica.
Estas células imprimibles presentan además la ventaja de ser más eficientes que las de silíceo en cuanto a la posibilidad que presentan de captar energía del sol.
Pero además, Bulovic destaca que estas células son más ligeras, transportables y flexibles, por lo que la fisura o la fractura de los paneles no sería un riesgo y por tanto tendrían una mayor vida útil.
Desde el MIT se entusiasman con poder desarrollar un sistema de energía solar más amigable con la arquitectura basado en estas nuevas células. Sus creadores aseguran que estás pequeñas células fotoeléctricas podrían instalarse en todos los ventanales de un rascacielos. Esto permitiría recolectar energía del sol sin que nadie se de cuenta.
Energía solar para el desarrollo sostenible
Para la Organización de las Naciones Unidas (ONU) la producción de energía solar tiene un gran potencial como suministro de energía para reducir las emisiones de carbono responsables del calentamiento global.
Por otro lado, desde la ONU sostienen que a medida que mejoran las tecnologías en células fotovoltaicas más probable es a futuro que este tipo de energía sea utilizada por más personas.
Además, el organismo internacional cree que con el crecimiento de la producción de la energía solar se puede fomentar el crecimiento de varias economías y estimular la creación de nuevos puestos de trabajo.