Los beneficios del aloe vera son muchísimos, tanto es así, que se ha convertido en una planta bastante popular y todos quieren usar los productos que la tienen como base por sus maravillosos efectos. Pero, ¿es necesario comprar artículos tan costosos cuando en realidad es posible hacer tu propio gel sin gastar un centavo?
El aloe vera se ha convertido últimamente en una necesidad, casi un elemento obligatorio para cualquier hogar, debido a sus propiedades que parecen multiplicarse con cada descubrimiento. Desde luego hay mucha exageración alrededor de esta planta, pero no es menos cierto que sus beneficios para el cuerpo son realmente constatables.
La “universalidad” de esta planta radica, principalmente, en su acción reparadora de tejidos y membranas, en especial, en los casos de quemaduras o lastimaduras, puesto que favorece una rápida cicatrización. Por otra parte, también sirve para tratar picaduras y urticarias provocadas por insectos, animales o plantas; incluso calma los ardores más fuertes, como el que producen las medusas y la ortiga.
Pero además de sus propiedades curativas en casos de emergencia, el aloe vera es, asimismo, un buen acompañamiento para el cuidado de la piel, puesto que provee una excelente hidratación y favorece la regeneración de las células del rostro, retardando de este modo el surgimiento de arrugas y demás imperfecciones. Pero no es necesario acudir a una farmacia para comprar los productos más costosos a base de aloe vera, ya que puedes conseguir un buen gel a partir de la planta por tu propia cuenta.
Gel casero y natural de aloe vera
Los elementos son pocos y fáciles de conseguir:
- tabla para cortar,
- cuchillo,
- cuchara y
- una hoja de aloe vera.
El procedimiento también es bastante sencillo y no gastarás nada de dinero. ¡No tienes excusas para no hacer este gel casero! Para comenzar, debes colocar la hoja previamente retirada de la planta y, sobre la tabla, cortar con el cuchillo ambas puntas y los bordes dentados.
Ahora viene la parte más delicada, que es seccionar la hoja en dos mitades de manera longitudinal, dejando expuesta la pulpa. A continuación, deberás sacar la pulpa con la cuchara y verterla en un recipiente donde se pueda conservar posteriormente.
Eso es todo, así se consigue el mágico gel de aloe vera de uso universal para tratar las bolsas y ojeras; hacer baños nutritivos para el pelo; combatir la caspa; desinflamar las encías, etc. En definitiva, se trata de un producto increíble que puedes conseguir sin que tu billetera lo padezca.