Esta receta de helado vegano tiene todo: es económica, fácil y natural. ¡Y sólo necesitarás dos ingredientes!
Cuando piensas en helado, probablemente lo primero que se te venga a la cabeza sea la nata (o crema de leche), porque eso es lo que le da al helado la textura que lo hace irresistible.
Pero si algo ha demostrado la comida vegana es que todo se puede suplantar. En este caso, de manera natural.
Así que te dejamos una receta muy simple para hacer tu propio helado cremoso de frutas. ¡Prácticamente no tendrás que tomar nota!
Necesitarás:
- 1 plátano
- 1 fruta de tu elección 1 (fresa, melocotón, cereza, piña)
- Minipimer o procesadora
- Opcional: leche vegetal c/n
Procedimiento:
En primer lugar, debes colocar las frutas en el congelador. A la banana, con su cáscara. Y a la otra fruta, dependiendo cual sea, es conveniente que la pongas cortada y pelada. Mejor si es adentro de un recipiente que la proteja del frío.
Una vez que estén congeladas, retíralas y pela la banana ayudándote con un cuchillo. Luego córtala en pedazos pequeños y colócalas en un recipiente. Agrega la otra fruta y comienza a procesar con la minipimer o batidora de vaso.
Ten en cuenta que la banana cumple la función de dar cremosidad, por eso el sabor resultante dependerá de cuán madura esté y de la otra fruta que le agregues. Por ejemplo, si elijes fresas de temporada y bien maduras, te saldrá dulce y exquisito. Lo mismo con cualquier otra fruta que esté madura; a mayor madurez, más dulzor.
Otra recomendación: como la fruta estará muy dura y no queremos que tu minipimer se funda, lo ideal es que pongas la fruta más tierna arriba, así comienzas por procesar lo menos duro.
A medida que las frutas congeladas se van desarmando e integrando unas con otras, notarás que empieza a tener la textura del helado. Puedes agregarle si quieres un poquito (no demasiado) de leche vegetal para ayudar a procesarla. Pero no es necesario.
Solo ten en cuenta usar la minipimer con cuidado, procesando de a poco y con paciencia. No la mantengas funcionando a todo motor sin parar.
Cuando tengas lista la mezcla, puedes disfrutarla en el momento y agregarle si quieres algún topping como almendras, hojas de menta o lo que quieras. Otra opción es guardar tu helado en un recipiente y dejarlo en el congelador.
Intenta hacerlo, ¡te aseguramos que no te arrepentirás!
