¿Sabías que los artículos para limpiar el horno tienen componentes químicos que producen contaminación irreversible y que son nocivos para tu salud? Mejor sigue estas recomendaciones.
¡Limpiar tu horno puede ser tan nocivo para el medioambiente como para tu salud! En realidad, muchas de las acciones que realizamos en nuestro hogar producen un gran impacto contaminante en la atmósfera, el agua y el suelo.
Probablemente, asear a fondo el horno, incluso el microondas y las hornallas, sea una la tarea más fastidiosa del mundo. Pero lo peor es la nube de químicos que se genera con los productos abrasivos que se consiguen en el mercado para quitar los restos de comida y grasa.
Ser efectivos en la tarea de limpiar este artefacto fundamental de la cocina no debe suprimir la responsabilidad ambiental que nos toca. Hay sustancias ecofriendly que podemos utilizar que no contaminan y tampoco irritan la piel ni dejan olores desagradables.
Los riesgos que corres al limpiar el horno
El gas butano que suele agregarse a algunos limpiadores para horno o sustancias químicas volátiles como la monoetanolamina, resultan sumamente nocivos para los pulmones y la piel.
En pequeñas dosis, agentes que tienen una acción corrosiva como el hidróxido de sodio (sosa cáustica) pueden irritar los ojos. La sosa, en concentraciones más altas o por la exposición durante largos períodos de tiempo, puede causar daño permanente a la córnea, según datos de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Además, la mayoría de estos productos químicos desprenden partículas que contaminan el aire, el agua y el suelo. Su acción es acumulativa y atenta contra la capacidad de restauración y resiliencia propia del suelo para deshacerse de la contaminación ocasionada.
Soluciones ecológicas, simples y baratas
Por todas estas razones, no esperes ni un momento más para reemplazar estos productos químicos por esta lista de elementos biodegradables que seguramente tienes a mano en tu hogar y dejarán tu horno como nuevo.
1. Combina vinagre y bicarbonato de sodio en solo dos pasos
Una opción para limpiar el horno es combinar media taza de bicarbonato con unas cucharadas de agua hasta formar una pasta.
Esta mezcla debe colocarse en los lugares del horno de donde quieras quitar la suciedad, menos en mecheros u otros elementos calefactores, y se deja actuar durante 12 horas (puedes hacerlo por la noche).
Cuando pasa el tiempo indicado, se quita el bicarbonato seco con un paño húmedo y, si es necesario, se raspan las partes más difíciles.
2. Limón para desgrasar a fondo
Con esta fórmula natural no necesitarás retirar las parrillas del horno y solo debes tener a mano dos o tres de limones y un cuarto de taza de agua, una esponja y una espátula.
El limón es un excelente desengrasante natural y te ayudará a limpiar el horno casi sin esfuerzo siguiendo estos pasos:
- Exprime el zumo de los limones en una fuente para horno y añade un 1/3 de agua. Puedes incluir las pieles del limón en la mezcla.
- Coloca el recipiente en el horno encendido y deja que actúe durante media hora a una temperatura de 120 ºC.
- Deja enfriar el horno y usa un paño húmedo para fregar la suciedad. Luego repasa con un trapo seco.
3. Sal gruesa de acción eficaz e inodora
La sal se utiliza para limpiar las manchas de grasa difíciles de remover. Puede reemplazar al vinagre al combinarlo con bicarbonato y agua.
4. El efecto limpiador de bebida cola
Lo más difícil de la limpieza del horno son las parrillas. Para esto no hay remedio más infalible que el uso de una bebida carbonatada de cola.
Solo hay que dejar las parrillas en remojo con la gaseosa cola, de cualquier marca, y luego raspar con trapo húmedo, quitar con agua y, por último, secar.