El cambio climático, la acción del hombre e incluso desastres naturales pueden hacer desaparecer sitios de gran valor para el planeta.
El catálogo de las maravillas naturales del planeta ha ido perdiendo parajes que albergaban ecosistemas únicos. Actualmente, muchos otros lugares van camino al mismo destino.
Por acción del calentamiento global, las sequías y catástrofes naturales, sumado a la desforestación producto del avance de la actividad humana, existen territorios naturales donde se aceleran cada vez más los procesos de degradación que amenazan con hacerlos desaparecer.
Conoce este listado de lugares únicos del planeta que desearás conocer antes de que sea demasiado tarde.
1. La Gran Barrera de Coral (Australia)
El calentamiento de los océanos por acción de las emisiones de carbono de los grandes centros urbanos y las grandes industrias del mundo está llevando a que la Gran Barrera de Coral australiana pueda desaparecer a mediados de siglo si no se reducen los actuales niveles de contaminación, de acuerdo a un estudio de la UNESCO.
Además, dos nuevas amenazas mantienen en vilo a biólogos marinos y ambientalistas. Por un lado, una especie invasora de estrella de mar que se alimenta de corales. Por otro, la acidificación de los océanos. Ambos representan un grave peligro para la supervivencia de la vida del ecosistema de la Gran Barrera.
2. Mar Muerto (Asia)
El Mar Muerto es el gran lago salado de Asia que se encuentra a 430 metros bajo el nivel del mar, siendo uno de los puntos más profundos en tierra firme. Su conservación representa un gran desafío: sus aguas se están evaporando debido a la impactante disminución del caudal de su principal afluente, el río Jordán.
Otras causas que lo afectan son el efecto del calentamiento global y la sobreexplotación de sus cuencas por sus minerales.
Por su nivel de salinización tan elevado (10 veces más que el mar), la única vida posible que puede albergar el Mar Muerto son bacterias y hongos microbianos, pero sus aguas tienen propiedades únicas.
La organización ambientalista EcoPeace Oriente Medio advierte que si este espejo de agua llega a desaparecer tendrá un impacto negativo en la vida de millones de aves migratorias que cada año acuden en invierno para alimentarse y descansar bajo un clima más templado.
3. Isla de Madagascar (África)
La cuarta isla más grande del mundo corre peligro de extinción y, por lo tanto, su rica biodiversidad podría desaparecer. Su conservación es clave para el planeta: el 5% de especies animales y vegetales son endémicas, es decir, no se encuentran en ningún otro rincón del planeta.
Según datos publicados por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), sus mayores amenazas son la caza ilegal y la creciente tala de palmeras para instalar plantaciones de arroz y palmitos comestibles, sumado a problemas de contaminación.
La instrumentación de políticas ambientales comprometidas con la conservación de los bosques de palmeras y una adecuada recolección y conservación de las semillas podrían ser las principales soluciones para proteger el hábitat de Madagascar.
4. Cumbres del Kilimanjaro (Tanzania)
Las grandes nieves permanentes de las cumbres de Kilimanjaro, la montaña más alta de África, se retraen cada año por acción del calentamiento global y la deforestación, que reducen el nivel de nevadas en el lugar. Si no se hace algo al respecto, se estima que podrían desaparecer por completo antes de 2050.
Según la European Space Agency (ESA), la desaparición de los grandes bloques de hielo en las cumbres alterará las capas de vegetación que van aumentando su espesor a medida que desciende la altura. Cualquier cambio en la humedad del ambiente afectará las especies vegetales que se encuentran en la selva seca.
La problemática se agrava en la región por la desforestación que realizan las comunidades locales, en tanto que la fragmentación del bosque es responsable de una paulatina extinción de las especies de grandes mamíferos. Actualmente, toda el área es estudiada y protegida desde que fue declarada reserva natural.
5. Islas Maldivas (Asia)
Islas Maldivas es un archipiélago tropical compuesto por 1.190 islas coralinas distribuidas en 26 grandes atolones que podrían desaparecer bajo el mar a fines del siglo XXI, debido al daño ocasionado por el cambio climático.
Como consecuencia del hundimiento de las islas también desaparecerán sus bancos de corales por el aumento de la temperatura del mar y arrasará con la vida de los animales que los habitan, especialmente de las especies de tortugas marinas.
6. Islas Galápagos (Ecuador)
De acuerdo a datos publicados en 2018 por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), la mitad de las especies de plantas y animales en peligro por el cambio climático se encuentra en los espacios naturales más importantes del mundo.
Como tantos casos que hemos registrado en este nota, el caso de la Isla Galápagos se destaca por ser refugio de cientos de especies de fauna marina como iguanas marinas, tortugas, leones marinos, pinguinos, entre otros; muchos reptiles son endémicos del lugar.
La fauna de las islas se ven afectadas por la gran afluencia de turistas y las especies extranjeras que han invadido su hábitat.
7. Los glaciares de la Patagonia (Argentina, Chile)
En 2018, se contabilizaba que los glaciares patagónicos habían perdido más de 1.000 kilómetros cuadrados de superficie en seis décadas. Y el pronóstico es que esta tendencia podría acelerarse como consecuencia del calentamiento global.
Los hielos de la Patagonia representan una de las capas glaciales más gruesas del planeta. Junto con los glaciares y hielos continentales del resto del mundo, mares y océanos, forman las reservas de frío que funcionan como grandes reguladores de la temperatura de la Tierra.
El deshielo de los grandes bloques del planeta acentuaría condiciones adversas en relación al agua y afectaría la vida de todo los habitantes, llevando más sequía a aquellas regiones que dependen del deshielo y provocaría desastres naturales con inundaciones.
Todo dependerá del compromiso de las grandes potencias del mundo hacia el próximo compromiso ambiental, de cara al fracaso de los acuerdos establecidos en la Cumbre de París. El mundo deberá intensificar sus acciones para reducir los niveles de carbono.
El arrecife de Belice, un caso esperanzador
Según información del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés), el ecosistema de la segunda barrera de coral más grande el mundo ya no integra las listas del patrimonio en peligro de extinción.
Por recomendaciones de especialistas y acción del gobierno, el cese de las actividades de explotación petrolera en sus inmediaciones le otorgó una chance más respecto a sus oportunidades de supervivencia.
Sin embargo, las organizaciones ambientalistas se encuentran en alerta ante cualquier amenaza industrial que actúe en la zona. Mientras tanto, se espera poder avanzar en la reglamentación de medidas que ayuden a proteger los manglares en Belice.