Es posible, gracias a la receta del shampoo casero, tener un cabello sano y grueso sin usar químicos u otros productos nocivos.
No temas y simplemente confía: esta receta casera de shampoo nunca tendrá los químicos que tienen los productos del mercado, los cuales suelen prometen ventajas, y parecen traerlas, pero al final, sólo provocan situaciones irreparables. Enriquecer, hidratar y nutrir el cuero cabelludo y las raíces con vitaminas es algo que puede ser alcanzado con ingredientes naturales de fácil acceso.
Este shampoo casero puede convertirse en una práctica habitual de tu tratamiento capilar, que, aunque ahora no lo sea, es muy acertado en la mayoría de los casos. Lo que debes asegurarte es que no tengas cicatrices, imperfecciones o lunares que puedan dañarse.
Si no tienes nada de eso, puedes confiar en que este producto casero te brindará salud y belleza al convertirlo en una parte de tu vida diaria.
Receta de la loción milagrosa: el shampoo preparado en casa
Ahora, con esta técnica, podrás cuidar tu higiene de un modo ecosostenible. Es por ello que te harás un bien a ti mismo, a la naturaleza y al mundo que te rodea. Por otro lado, se trata de productos que fácilmente se encuentran en el supermercado. Su precio y ventajas económicas serán evidentes. Una vez que los consigas, durarán mucho tiempo y dejarán de tener atractivo las lociones comerciales. Sigue nuestra guía para preparar el shampoo.
Es importante que sepas, antes que nada, que los shampoos comerciales son dañinos para las fibras capilares por la presencia de siliconas, vaselina y plásticos presentes en la producción de estos productos. Es por ello que tendrás que armarte una botella reutilizable cada tanto para no usar plásticos contaminantes, y, claramente, los ingredientes que te dejamos a continuación.
Para cabellos normales sin situaciones particulares, y pretendiendo llevar a cabo una limpieza diaria, solo basta con hervir 100 ml de agua junto con un trozo de jabón de Marsella. Espera a que hierva y cuando el jabón esté disuelto, añade una cucharadita de alcohol etílico y tu favorito aceite esencial.
Si, por otro lado, tienes un cabello graso, lo mejor será bicarbonato y agua. De este modo eliminarás el sebo y la caspa de un modo natural. Verás cómo el cuero estará más duro al principio. Esto se debe a que la crema actúa en profundidad, pero una vez aclarado todo, tendrás un resultado satisfactorio.
Para terminar, puedes optar por una mezcla de rúcula, agua y bicarbonato. Solo deberás hervir durante 15 minutos y después retirar las hojas. Esta mascarilla aporta brillo y suavidad. Aplica durante 15 minutos y enjuaga.