Científicos sospechan que los osos de agua o tardígrados podrían haber sobrevivido en la Luna, cumpliendo con una misión espacial.
Aunque casi imperceptibles para el ojo humano, los osos de agua o tardígrados son objeto de admiración en la comunidad científica internacional por ser los animales más indestructibles del planeta. Y por protagonizar una historia inverosímil como parte de la experiencia de la sonda espacial Beresheet.
Los tardígrados fueron descubiertos por el zoológo alemán Johann August Ephraim Goeze, quien los bautizó como “ositos de agua”. Y es que su forma de caminar le pareció similar a la de los osos, pero con cuerpo similar al de una oruga con ocho patas.
Viven en ambientes húmedos, musgos, líquenes y acuíferos. De adultos, los tardígrados llegan a medir solo 0,5 milímetros, pero parecen tener superpoderes.
Insectos microscópicos con propiedades de superhéroes
Existen tres cualidades asombrosas sobre este microorganismo, conocido también por los científicos como “cerdito de musgo”.
Por un lado, se cree que estos animales podrían sobrevivir a la raza humana. Esto es porque poseen sus mecanismos de adaptación ante condiciones en las que no podrían sobrevivir otros seres vivos.
Por otra pate, se trata de un insecto que posee una especie de superpoder dado por su mecanismo de criptobiosis. Gracias a esto, puede suspender sus procesos metabólicos y sobrevivir a radiaciones, a la presión del fondo marino, a temperaturas inferiores a los -200 °C.
Incluso sobrevivirían en el espacio. Hay razones para sospechar que una colonia gigante de este microscópico insecto se habría reproducido en la Luna. Sucede que, en 2018, la sonda Beresheet de la misión espacial de la agencia israelí SpaceIL llevaba a los pequeños osos de agua como parte de su carga.
La odisea de los osos de agua en el espacio
La sonda Beresheet tenía la misión de dejar en la Luna un registro de información de nuestro paso como raza humana por el universo. Debía depositar en territorio lunar una biblioteca almacenada en un formato similar al DVD, con una capacidad de almacenaje de 30 millones de páginas sobre la historia de la humanidad y contenidos culturales.
Además, una carga de tardígrados deshidratados acompañaba a la biblioteca, junto a diversas sustancias como ADN y una envoltura de resinas similar a la resina fosilizada de los árboles.
Pero la misión lunar no prosperó; la sona se estrelló por un fallo en su motor mientras intentaba alunizar y el destino de la carga del explorador espacial es un misterio.
No obstante, una teoría de Nova Spivack, presidente de la Fundación Arch Mission, sostiene que los tardígrados podrían haber sobrevivido debido a su proceso de criptobiosis.
“Hay evidencia científica de que estas criaturas entran en un estado de inactividad que les permite detener todos sus procesos metabólicos y detienen el agua de sus células que es reemplazada por un proteína que las transforma en vidrio”, explicó Spivack.
La criptonita de los tardígrados
Así como destacamos los superpoderes de este pequeño insecto, también debemos echar por tierra el mito de su inmortalidad.
Un estudio de la Universidad de Copenhague analizó la tolerancia de los ositos de agua a las altas temperaturas. Y se descubrió que el calentamiento global podría ser fatal para esta resistente especie.
El estudio concluye que los tardígrados son vulnerables a las altas temperaturas si son sometidos a esta durante largos periodos de tiempo.
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