Con el objetivo de favorecer su supervivencia, los edificios superiores a cinco pisos deberán incluir ladrillos particularmente destinados a las abejas, una especie en creciente riesgo.
La propuesta no es nueva; es más, los ladrillos para abejas tienen algunos años de existencia. No obstante, la aceleración del riesgo de extinción de esta especie obligó a que se vuelvan un requisito para la construcción, con el fin de crear lugares seguros para la formación de colmenas.
Se trata de ladrillos de hormigón con perforaciones específicamente diseñadas para favorecer la anidación de las abejas en un lugar seguro y eficaz. De este modo, se reducirá el número de colmenas construidas en lugares poco convenientes para los habitantes que moran en edificios y para las abejas mismas, dado que estas colmenas son por lo general eliminadas bruscamente y se obliga a los insectos a huir a partir del uso del humo por expertos en plagas.
El uso de estos ladrillos en la construcción de paredes externas permite que las abejas aniden en su interior y no sean una molestia, al mismo tiempo que les garantiza un refugio incluso en invierno. Es decir, se trata de una ventaja para todos.
Es precisamente por este intento de conservación de las abejas (incluidas las solitarias) que en Brighton, Reino Unido, a partir de abril del año que viene los ladrillos deberán estar obligatoriamente presentes en edificios que cuenten con más de cinco pisos. Se prevé que los ladrillos estén disponibles para el comienzo de la primavera, momento en el que los huevos empiezan a eclosionar.
¿Cuán convenientes son los ladrillos para abejas?
Más allá de que cualquier propuesta orientada a la preservación del medio ambiente debe ser celebrada como algo positivo, es preciso analizar si en esta ocasión los ladrillos perforados son realmente una contribución. La premura de los concejales de Brighton por hacer que los ladrillos para abejas sean obligatorios demuestra la magnitud del problema.
El famoso “Bee Brick” está fabricado para contener una parte maciza -que garantiza su resistencia- y una parte perforada con varios agujeros para que las abejas aniden. Sin embargo, hay cierto escepticismo respecto de su seguridad y efectividad. Particularmente, se sostienen dos argumentos en su contra.
En primer lugar, respecto de la seguridad efectiva de los ladrillos, se argumenta que sin un cuidado regular de limpieza y revisión, los ladrillos podrían ser un foco de proliferación de ácaros y bacterias, poniendo así en peligro a las abejas mismas. Ciertos ecologistas, por su parte, sostienen justamente lo contrario.
El segundo argumento en contra tiene que ver con la comercialización de los ladrillos. Algunos sostienen que esto no es más que una ladina campaña de greenwashing destinada específicamente a desviar la atención del problema real, esto es: el exceso de construcción desregulado y temerario que afecta la presencia de árboles, espacios verdes y jardines en las ciudades.