En distintos lugares del mundo, dos jóvenes que comparten su pasión por el surf han creado prototipos de eco tablas elogiadas por el mundo del diseño industrial.
Por diferentes rincones del mundo, jóvenes diseñadores están poniendo todo su ingenio creativo en resolver cómo ayudar al planeta creando productos que podamos utilizar en nuestra vida diaria elaborados con la basura que se genera en las grandes ciudades.
Tanto talento planetario está dando sus frutos y actualmente existen propuestas sostenibles incluso en el mundo del surf.
Se trata de las tablas ecológicas del portugués François Jaubert y del estadounidense Taylor Lane, dos proyectos separados que cuentan con una certificación sostenible que avala sus procesos de elaboración, otorgada por la organización Sustainable Surf.
Según explica el sitio Arquitectura y Diseño, las tablas de surf tradicionales se fabrican con elementos como fibra de vidrio, resina y espuma de poliestireno, que al no ser biodegradables resultan perjudiciales para el medio ambiente. Además, para su fabricación requieren de procesos que liberan gran cantidad de sustancias tóxicas.
Es por ello, y por el creciente compromiso con la limpieza de los mares, que la industria del surf se está planteando seriamente cuál es su impacto ambiental y cómo generar una actividad sostenible.
Tras investigar varios materiales reciclables que pudieran brindar robustez y ser livianos al mismo tiempo, en Portugal, el arquitecto François Jaubert diseñó una tabla de surf elaborada en un 90% con materiales reciclables y cuya estructura central está realizada en cartón reciclado.
Al estar hecha en cartón reutilizado con contorno de resina, su tabla de surf puede usarse sólo una vez, ya que es desechable.
La eco tabla de Jaubert recibió el premio Vissla en 2016, el cual que reconoce los mejores diseños que transforman la basura en complementos y equipos para deportes y actividades realizadas en el océano.
En 2017, otro diseño novedoso causaría asombro en el movimiento surfista: 10.000 colillas de cigarrillos lograron convertirse en una eco board, marcando una verdadera revolución debido al empleo de un material que es sumamente tóxico para las playas y su biodiversidad.
El proyecto fue llevado a cabo por el californiano Taylor Lane, quien pasó tres meses juntando colillas de tabaco en una playa de California para fabricar una tabla de surf que presentó en el concurso “Creators & Innovators Upcycle Contest”, organizado también por Vissla y Surfrider Foundation.
En el siguiente video puedes ver cómo se construyó y conocer más sobre esta eco tabla.
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