No juegues con la iluminación. Cada bombilla prendida en un ambiente vacío contamina el planeta (Foto de Sam Lion - Pexels).
Con pequeños cambios puedes ahorrar energía y ayudar a construir un planeta más sostenible. El secreto está en el buen uso de artefactos eléctricos.
El ahorro de energía y la eficiencia en el consumo son claves para el mundo que se viene. Es que mientras más energía consumimos en nuestros hogares, más contribuimos a la emisión de carbono a la atmósfera porque esta proviene mayormente de combustibles fósiles.
El Objetivo de Desarrollo Sostenible número siete de las Naciones Unidas propone que el mundo produzca y consuma energía económica y no contaminante para 2030. Desde nuestros hogares podemos contribuir a esta meta haciendo un uso energético más consciente.
Desde la Organización de las Naciones Unidas recomiendan desenchufar todos los dispositivo que están fuera uso. Por recomendaciones de los fabricantes, dejamos enchufados todo el día televisores, microondas, radios, computadoras. Pero el modo stand by no es amigable con el ahorro de energía.
Por otra parte, en muchos hogares suele haber un exceso de luces en fachadas por estética. Esto también es un despilfarro de recursos. Enciende sólo las luces que necesitas, apaga todos los focos de habitaciones y otros ambientes vacíos, sin importar qué tipo de bombilla estés utilizando.
La calefacción o refrigeración de tu hogar demanda una gran cantidad de energía. Asegúrate de tener siempre las puertas y ventanas cerradas herméticamente. De esta manera tendrás una climatización más eficiente.
En invierno trata de colocar la mayor cantidad de alfombras posibles. Esto ayudará a que la estructura de tu casa no pierda el calor tan rápido. Además, tu hogar se calentará en menos tiempo por lo que deberás exigir tanto el termostato.
Puedes utilizar también un termotanque solar. Así, el agua bajará por las cañerías siempre caliente gracias a la acción del sol. Es un opción económica y muy rendidora que ayudará también a la climatización del hogar.
Cuando cocinamos también utilizamos mucha energía y necesitamos hacer más eficiente este uso. Muchos hornos y hornallas alrededor del planeta son eléctricos.
Una buena forma de no derrochar energía es utilizar cacerolas que cierren bien. De esta manera el calor se concentrará en menor tiempo en el recipiente y no habrá tanto desperdicio de energía.
Hervir solamente el agua que necesitamos es otro de los consejos de las Naciones Unidas. Es que muchas veces en las pavas eléctricas o en las hornallas colocamos agua de más, y para calentar más volumen se necesita más energía.
El último grupo de recomendaciones de las Naciones Unidas para el ahorro energético está relacionado con la utilización de los electrodomésticos. Cuando vayas a comprar un dispositivo nuevo, asegúrate que sea clase A.
La gran mayorías de los dispositivos de aire acondicionado, lavadoras, secarropas, lavaplatos, neveras y congeladores vienen con un sistema de utilización económica. Utilízalos en este modo.
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