Trabajar 4 días a la semana no es la propuesta de algún perezoso que desea más días de descanso. Es algo que la ciencia incluso ha confirmado como positivo, y productivo, desde muchos aspectos.
Desde luego no suena nada mal trabajar cuatro días y tener uno más para el fin de semana. Pero no es sólo una expresión de deseo.
Hasta el momento no hay indicios de que este sistema laboral se vaya a aplicar en todo el mundo, pero quienes lo defienden sostienen que tres días de descanso podrían incluso aumentar la productividad de las empresas gracias a un mayor bienestar del staff. El equilibrio entre trabajo y ocio es una fórmula mucho más efectiva que la exigencia excesiva.
Actualmente se están llevando a cabo algunas investigaciones al respecto en el Reino Unido. En principio, y aunque las conclusiones no son definitivas, el salario podría mantenerse incluso reduciendo las horas laborales, ya que el modo de distribuir las horas permitiría a los trabajadores ser igual o más eficientes que en el sistema tradicional de 5 días de trabajo por 2 de descanso.
Los países que están participando de las investigaciones sobre este nuevo sistema laboral conducidas por las universidades de Cambridge y Oxford son Estados Unidos (con la participación de la Boston College), Canadá, Irlanda, Australia, Nueva Zelanda y Bélgica.
Las razones para adoptar esta planificación son 7 bien concretas
1- Productividad: las personas son más productivas cuando trabajan en condiciones meditadas
2- Bienestar: relacionado con el anterior, al tener una vida más balanceada entre la vida privada y la laboral, los trabajadores sufren de menos estrés y fatiga, tanto física como mental, lo cual puede conducir a la larga a un mayor beneficio para los empleadores, ya que las licencias y faltas se reducirían considerablemente.
3- Compromiso: al contar con mucha más energía luego de tres días de descanso, el trabajador tiene más entusiasmo y motivación para involucrarse en sus tareas y alcanzar con más rapidez los objetivos.
4- Calidad: las personas más capacitadas y autorizadas se sentirían atraídas por este tipo de propuestas, ya que la perspectiva sería mucho mejor y habría un mayor volumen de postulantes.
5- Ambiente: ir menos días al trabajo significa para muchas personas usar menos el auto y por lo tanto emitir menos gases de efecto invernadero, es decir que se trata de una decisión también sostenible.
6- Innovación: tener un sistema de trabajo revolucionario proporciona una ventaja en la competitividad con otras empresas, ya que atraería un mayor interés.
7- Igualdad de género: al estar más tiempo en el hogar, las tareas entre madres y padres se podrían distribuir con mayor equidad, sobre todo las del cuidado de los hijos.