Mantener tu forma y abrir el apetito con sabores deliciosos es posible. Solo basta con que sigas ciertos consejos. Prepara esta receta baja en calorías para sentir el éxito en el paladar.
Para convertirse en un gran chef, el primer paso son preparaciones fáciles como la que te traemos hoy. El tema es que vamos a lograr sorprenderte, porque cuando decimos sencilla no estamos implicando banal o poco original. Se trata de un sabor conocido que está repleto de ventajas: sabor, velocidad y economía.
Los ingredientes de esta rápida receta son de amplia disponibilidad. Son de uso común y realmente cuestan muy poco. Ver para creer.
Arremángate y enciende las hornallas, es hora de mejorar tus habilidades en la cocina y convertirte en una fuente de inspiración culinaria para tus amigos mientras adoptas un enfoque ecológico. En definitiva, la clave del éxito.
Receta baja en calorías, rápida y barata
Cualquiera que viese el plato mencionado sobre la mesa le atribuiría una gran cantidad de grasas y kilocalorías, pero lo cierto es que no tiene nada de eso. Vas a revolucionar tu forma de cocinar e incluso tu concepción de la cocina. Se trata, particularmente, de una receta con una adecuada cantidad de hidratos de carbono, por si estás bajo alguna dieta o entrenamiento. Veamos de qué se trata y te aseguramos que no te arrepentirás.
La foto no es un indicador de alimentación sana, pero es todo ficción. Eso también es parte de su encanto: buena pinta, nada de grasa. Su básica y rápida preparación, por otro lado, puede complementarse de otros modos o con otros ingredientes.
Claro que esto dependerá de los objetivos que tengas y puedes seguir la receta al pie de la letra para mantener un bajo consumo calórico, o dejar volar la imaginación para crear algo único y con más sabor.
Las patatas son el ingrediente básico como fuente de potasio y minerales.
Para empezar vas a necesitar 900 g de patatas, lava y pela el producto con cuidado. Una vez listo ese paso, córtalas en trozos. Se trata de croquetas de patata.
Arrójalas en agua hirviendo para triturarlas luego y añadir las especias que más te gusten. Si la meta es que tenga la menor cantidad posible de calorías sólo agrega sal, pimienta y una pizca de cebollino.
Ahora solo resta agregar la fécula de maíz y hacer panes. Así la mezcla se apelmaza fácilmente. Luego, forma bolitas o cualquier forma que sea fácil de poner en huevo y empanizar.
El carácter crujiente y el embriagador aroma los brinda una sartén ligeramente engrasada.