La tortilla de macarrones ya es una auténtica institución. Vamos a prepararla de un modo simple, rápido y con un resultado delicioso.
La tortilla de macarrones, codiciada, deliciosa y para cualquier momento -hasta como refrigerio-, es completamente atemporal. Mientras que se trata de un plato histórico, también es uno muy pobre que viene de la cocina de recuperación de las abuelas napolitanas.
Dadas las difíciles circunstancias de ese tiempo, no podía desperdiciarse absolutamente nada y, al mismo tiempo, hacía falta alimentarse para ganar energía. El ragú se preparaba, clásicamente, durante el almuerzo del domingo con toda la familia reunida. Luego, ese ragú se combinaba con los macarrones sin desperdiciar nada de nada.
Lo que ocurría al día siguiente era que, en una sartén, se mezclaban las sobras con huevo y algunos otros ingredientes para recuperar los restos. Ahora vamos a descubrir la receta. Te aseguramos que es muy fácil.
Una preparación fácil y rápida de tortilla y macarrones
Aunque se trata de un plato a base de sobras, es delicioso. Se prepara sin condimentos, pero se le agregan huevos y queso. Nos vamos a mantener fieles a la receta original y, si tienes sobras de pasta, ahora podrás aprovecharla. Esto es lo que vas a necesitar:
- 450 gr de pasta con salsa o salsa de carne
- 6 huevos medianos
- 150 gr de queso parmesano rallado
- 100 gr de provolone cortado en dados
- Sal y pimienta para probar
Empieza por poner los huevos crudos en un tazón grande. A ello agregue queso parmesano, la provoleta cortada en pedacitos, sal, pimienta y ahora toca mezclarlo todo. Puedes añadir otros quesos que te hayan sobrado o algún embutido como salame, jamón o mortadela -también cortados en cubitos-.
Una vez que esté todo bien mezclado, agrega la pasta que te sobró e incorpórala adecuadamente. Una vez que tengamos una mezcla homogénea, deja en la nevera para que repose durante 20 minutos, aproximadamente.
Vierte la masa en el centro de una sartén antiadherente engrasada que esté a cierta temperatura. Cocina a fuego fuerte durante 5 minutos y, luego, tapa y cocina durante otros 10 minutos.
Pasado el tiempo, cocina otros diez minutos del otro lado de la tortilla. En la superficie va a formarse una costra marrón: no te preocupes que es justamente lo que necesitamos. Una vez pasado el tiempo, sirve en una fuente grande y prueba inmediatamente. ¡¿Verdad que sabe delicioso?!