Las ventanas solares se comercializan y ya forman parte del paisaje de algunos centros urbanos, aunque aún están en etapa experimental.
Cumplen con su objetivo, a pesar de que aquellos emprendedores a cargo de su desarrollo aseguran que aún quedan algunos años de experimentaciones y mejoras para poder lograr todo el potencial que se espera de ellas.
Estamos hablando de las denominadas ventanas solares. En su definición más sencilla, no son otra cosa que ventanas con la capacidad de generar energía a partir de los rayos solares. O, en algunos casos, de fuentes artificiales de luz.
Es increíble todo el potencial de este material. Actualmente ya se encuentran en el mercado vidrios solares que son más opacos que una ventana regular. Tienen aproximadamente un 70% de transparencia y una capacidad de generar electricidad bastante aceptable.
Esta capacidad para generar energía dependerá de qué tan opaco sea el material, pero la regla general es que a mayor transparencia, menor es la capacidad de renovar energía. Los vidrios totalmente opacos pueden generar el doble de electricidad que los más transparentes.
Eficiencia en ahorro energético, de afuera hacia adentro
Aún distan mucho de alcanzar todo su potencial, pero las ventanas fotovoltaicas ya presentan una serie de valiosos beneficios. Si, por ejemplo, las comparamos con los ya conocidos paneles solares, las ventanas permiten el paso de la luz solar y no necesitan espacio extra para su instalación.
Además, se fabrican en una amplia gama de tamaños y formas que pueden ser diseñadas a medida y con formas especiales. Pudiendo variar también en colores y grados de transparencia, según las necesidades del usuario.
Son de fácil instalación y contienen filtros que reducen la entrada de calor al interior del inmueble. Esto redunda en un mejor aislamiento y eficiencia, permitiéndonos ahorrar en el uso del aire acondicionado en los meses de calor y de la calefacción en los meses más fríos.
El uso de las láminas solares pueden actualmente hacernos ahorrar hasta la mitad la utilización de fuentes externas de electricidad.
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Ventanas solares y el futuro de las energías renovables
Pero no todo queda ahí, existen en la actualidad numerosas innovaciones en pleno desarrollo que convierten a esta rama de la tecnología en una revolución inminente en el terreno de las energías alternativas.
Algunas de ellas son las siguientes:
- La compañía estadounidense New Energy Technologies ha creado un revestimiento líquido que puede ser aplicado sobre superficies transparentes y que tiene la capacidad de absorber la luz, transformarla en corriente eléctrica y así poder almacenarla en baterías o ser utilizada directamente por dispositivos eléctricos.
- En la Universidad Tecnológica del Sur de China, un grupo de investigadores ha sido capaz de desarrollar una especie de pigmento que permite bloquear la luz solar y producir energía al mismo tiempo .
- Un grupo de investigación de la Universidad de Linköping, en Suecia, está desarrollando lo que se conoce como células solares orgánicas. Estas aún distan mucho de poder competir en eficiencia con las de silicio, actualmente en el mercado, pero se espera que en los próximos años se pueda contar con la producción de este tipo de células.
- Existen, además, las denominadas placas solares híbridas. Estas tiene la particularidad de no sólo generar energía eléctrica a partir del sol, sino que también generan energía térmica. Esta tecnología permite, por ejemplo, el calentamiento de las piscinas en épocas en las que las temperaturas externas aún son bajas.
Estas son algunas de las tecnologías que día a día se mejoran y optimizan para permitirnos acercarnos al autoabastecimiento energético. Esto es necesario para lograr finalmente nuestra independencia de las fuentes de energía no renovables que, inexorablemente, terminarán por agotarse en un futuro no muy lejano.
Queda camino por recorrer, pero el futuro afortunadamente ya es una realidad al alcance de nuestras manos.
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